Benilloba negocia con otros bancos la apertura de una sucursal tras el cierre del Sabadell
El Ayuntamiento llama a la puerta de Cajamar, Caixa Ontinyent, Caixa Popular y Bankinter en busca de una nueva oficina que pueda atender las necesidades de sus vecinos, la mayoría, jubilados y pensionistas
Los vecinos de Benilloba continúan sin oficina bancaria desde que el pasado mes de mayo el Banco Sabadell anunciara el cierre de la que era la única sucursal de la localidad. Una situación que ha provocado que, desde hace cuatro meses, subsistan con un cajero automático que, según la alcaldesa, Ana Delia Gisbert, la entidad pidió ubicar en un local municipal para garantizar su continuidad. Por este motivo Gisbert ha tomado medidas y ha iniciado negociaciones con cuatro entidades bancarias con el objetivo de abrir una nueva oficina para poder gestionar las necesidades de sus vecinos, la mayoría, de avanzada edad. "Estamos en ello. Estamos esperando que nos llamen de Cajamar, Caixa Ontinyent, Caixa Popular, también hemos hablado con Bankinter".
El Banco Sabadell ya cerró el cajero automático de Alcoleja avisando, curiosamente, que desviaba a sus vecinos a Benilloba, que actualmente se enfrenta al mismo riesgo. Agres y Penàguila también han sufrido la nueva política de cierre de oficinas en pequeños pueblos.