Cruz Roja reduce las ayudas de emergencia y refuerza su programa de empleo

La nueva estrategia de Cruz Roja Alcoy para combatir la pobreza, basada en el empleo en lugar del reparto de alimentos, comenzó a ofrecer los primeros resultados durante el año pasado. Así lo constata la memoria anual de la entidad, presentada este viernes. Más de 100 personas encontraron empleo durante 2017, 46 de ellas a través del programa de empleo que los responsables de la ONG califican de “éxito”.

La reorientación del servicio ha provocado un descenso de la entrega de alimentos, de la que el pasado año se beneficiaron 387 familias, muy lejos de las 876 de 2016. La mayor parte de esas familias, 232, eran españolas. Cruz Roja otorgó ayudas de emergencia para alquiler, luz o calefacción a 67 familias. Según la memoria, en 2017 fueron atendidas 591 personas en situación de extrema pobreza, que motivaron 4.998 intervenciones.

Buena parte de los beneficiarios de este tipo de ayudas en años anteriores fue derivado a otras entidades. “Dar alimentos puede cronificar y prolongar la situación de crisis. Hemos pasado de la caridad a la intervención, con planes personalizados orientados a que las personas puedan encontrar trabajo”, ha explicado el presidente de Cruz Roja Alcoy, Juan Miguel Cortés.

El plan de empleo consiguió insertar a 46 personas de 27 familias. Esta cifra solo incluye a los usuarios que han completado todo el itinerario del plan, que incluye diferentes sesiones de formación y prácticas en empresas. Otras 64 personas atendidas por Cruz Roja también encontraron empleo durante 2017. Algunas de ellas, como ha señalado el coordinador de Cruz Roja, Pablo Granados, accedió a un empleo sin haber completado todo el plan. “Haber insertado a más de 100 personas en un solo año es muy importante”, ha valorado Cortés, que se ha mostrado preocupado por la “precariedad salarial”, que provoca que aun teniendo empleo, las familias necesiten ayudas.