"El colegio es la vida del pueblo"

Los alcaldes de Agres y Alfafara reivindican la escuela rural como medio para la supervivencia de los municipios. Josep Manel Francés, alcalde de Agres, y Raquel Vicedo, de Alfafara, defienden las medidas aprobadas para aumentar alumnos en los aularios del Centro Rural Agrupado Mariola-Benicadell: pagarán el material escolar y ofrecerán un monitor que atienda a los alumnos a la hora de la comida.

Agres cuenta con tres clases que se reparten 25 alumnos. En Alfafara son 28 alumnos también repartidos en tres clases: una de infantil y dos de primaria. Son las voces de los alumnos de Agres y Alfafara, que aspiran a tener nuevos compañeros el próximo curso. La directora del colegio, Azariada Martínez, defiende el modelo educativo que promueve el centro y aplaude las medidas adoptadas por los ayuntamientos.

La directora, como otros profesores, recorre cerca de 50 kilómetros para trabajar en un modelo educativo en el que cree. Los alumnos, por su parte, llegan en bicicleta o en triciclo. Es otra de las diferencias de estudiar en una escuela rural.