El Molinar carece de protección legal tras dos décadas de presión urbanística

El acuífero Barrancones-Carrasqueta, conocido como El Molinar y que abastece en torno al 70% del agua que bebe Alcoy, está legalmente desprotegido. El perímetro de protección no está aprobado por la Confederación Hidrográfica del Júcar, el órgano competente, al que fue presentado en 2004. El organismo considera inviable aprobarlo por la dificultad para delimitar la extensión real de la reserva de agua.

Once años después de que el Ayuntamiento presentase a la Confederación Hidrográfica del Júcar el documento elaborado por la empresa Evren, el texto sigue en tramitación. La Confederación, no obstante, ha utilizado la propuesta presentada por el Ayuntamiento como guía para fijar restricciones y medidas de preservación. De hecho se basó en este documento para emitir sus informes primero sobre la posible construcción de un polígono industrial en La Canal y luego sobre el proyecto Alcoinova. Los terrenos superficiales del acuífero en término municipal de Alcoy son objeto de proyectos urbanísticos desde 1995, cuando el Gobierno local socialista, presidido por José Sanus, comenzó a plantear una posible intervención en la zona de la mano de la Sociedad de Inversiones de las Comarcas Centrales.

Fuentes municipales explican que los técnicos de la Confederación consideran inviable aprobar el perímetro de protección por la complejidad de delimitar la extensión de la bolsa de agua subterránea. Diferentes expertos plantean que la reserva puede extenderse hasta Almansa. La propuesta municipal solo ha estudiado el término municipal de Alcoy, donde establece los diferentes riesgos de contaminación.

La confederación entiende que la información es útil pero insuficiente como para aprobarla oficialmente. Así lo vienen manifestando durante los últimos años los responsables del organismo, tanto cuando gobernaba el PSOE como ahora que lo controla el PP.