El textil europeo apela a la unión de regiones para ganar mercado global

La patronal europea del textil, Euratex, celebró este miércoles su convención anual en Ontinyent. Sobre la mesa, la cooperación entre regiones para ganar competitividad en el mercado mundial. En la calle, la protesta de cientos de delegados sindicales de Comisiones Obreras contra el nuevo convenio colectivo del sector, que recoge un salario mínimo por debajo de los 14.000 euros anuales.

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, abrió una jornada de intenso debate, con presencia de técnicos, expertos y representantes de los principales clústeres del textil en Europa: junto a España, Italia, Francia y Portugal. El jefe del Consell abogó por impulsar una política industrial europea con la que “hacer frente a los desafíos del futuro”. Puig defendió la necesidad de “establecer las mejores alianzas posibles” para explotar “las enormes posibilidades” de la industria textil valenciana, cuya cifra de negocio creció un 2,9% el pasado año para rebasar por primera vez desde 2009 los 2.000 millones de euros. “El sector textil ha pasado una crisis profunda, pero en estos momentos está vivo”, dijo el presidente de la Generalitat, quien incidió en poner en marcha una política europea industrial, al estudio de la ya existente en el sector agrario.

Con las conferencias y mesas redondas en marcha dentro de la séptima convención de Euratex, Comisiones Obreras logró movilizar a cientos de delegados para hacer visible su malestar por el convenio pactado entre la patronal y UGT. Unas 2.000 personas, según el sindicato, protagonizaron concentraciones y manifestaciones para reivindicar un salario mínimo de 14.000 euros anuales.

Durante las protestas se vivieron momentos de tensión, después de que un cordón policial impidiese a los manifestantes acercarse al recinto de la convención. “Ha habido enfrentamientos pero sin consecuencias”, resumió el secretario autonómico de Industria de Comisiones Obreras, Pedro Javier Galarza. El sindicato, mayoritario en el sector, hizo una demostración de fuerza en el contexto de la convención, que clausuró por la tarde el conseller de Economía Sostenible, Rafael Climent. La Generalitat, según afirmó el presidente por la mañana, “será un aliado permanente” para que el sector textil adquiera la mayor potencia posible tanto en España como en Europa.