La ilusión se asienta en Mariola
Centenares de personas recorren el Campamento Real para vistar la jaima donde los Reyes Magos han pasado la noche, ver cómo los pajes leen las cartas depositadas en los buzones y los preparativos de los paquetes a repartir en la 132 Cabalgata
Desde las 9 horas del día 5 de enero, día de la Cabalgata, miles de personas han pasado por el Campamento Real de los Reyes Magos, Melchor, Gaspar y Baltasar. Dentro del recorrido hay 800 personas que visitan primero, después de esperar su turno en las colas de entrada, la jaima de sus Majestades donde han pasado la noche del 4 de enero leyendo las cartas que fueron depositadas en los buzones de las burritas y donde han descansado tras un largo viaje para hacer realidad los ilusiones y sueños de miles de niños. Tras el asentamiento de los Reyes, visitan la zona donde los pajes, que se encargan de ayudar a Melchor, Gaspar y Baltasar, leen más cartas y van empaquetando los paquetes y escribiendo el destinatario. En esa misma zona, están los tres dromedarios que se encargarán por la noche de llevar a los Reyes Magos por el trayecto que harán por las calles de Alcoy. Este año también se pueden ver y hacerse fotos con las burritas que ayer recogieron las ilusiones dentro de sus buzones, además de inmortalizar el momento con los pajes o con varios photocalls.
Con varios organizadores durante todo el trayecto, la Asociación Cultural Samarita, se encarga de que las personas vayan recorriendo todo el trayecto que compone este año el Campamento, que se ha triplicado en cuanto a recorrido respecto al 2016. Desde primera hora, incluso antes de que abrieran el asentamiento, han sido varias las personas que han subido hasta el Preventorio para ser los primeros en ver y disfrutar del lugar donde los Reyes y sus ayudantes empiezan a hacer realidad las ilusiones de miles de personas. Durante la mañana no han parado de subir autobuses, taxis, coches particulares, incluso gente que ha subido andando, mientras que la cola para entrar cada vez era más larga y la han tenido que ir reestructurando a medida que el número de personas aumentaba, para adaptarla al espacio disponible. El Campamento Real se podrá visitar hasta las 13 horas y la previsión es que aumente considerablemente la cifra de visitantes respecto al año pasado que ascendió a más de 7.000.