Los vigilantes del aire

Cincuenta voluntarios se suman a las labores de prevención de incendios, a partir de ahora, desde el aire.

La Agrupación Contra Incendios Forestales, ACIF, ha firmado un convenio con el Club Ultraligeros La Montaña para extender su vigilancia terrestre a un nuevo punto de control: el aéreo. Esta mañana ACIF ha impartido un curso para formar a los pilotos del aeródromo ubicado en Alcosser de Planes para que actúen como voluntarios contra-incendios forestales cuando realicen vuelos privados o para alumnos de la escuela. El objetivo es, según explica Jordi Gutiérrez, presidente de ACIF, ganar tiempo a las llamas y llegar donde ellos no llegan. "De lo que se trata es que puedan distinguir entre las diferentes columnas de humo, diferenciar las quemas agrícolas y que sepan orientar a los medios profesionales hasta el incendio y saber si el incendio se desplaza hacia alguna población para que, cuando los medios vayan a apagar el fuego, ya tengan toda esa información de primera mano. Desde el aire, lo tienen todo a la vista; nosotros desde tierra no tenemos visión suficiente".

Santiago Reig, presidente del Club Ultraligeros La Montaña, asegura que, desde las alturas, pueden avistar más rápidamente los fuegos que se declaren en un territorio más vasto que desde tierra: "Desde la vertical del aeródromo, a una cierta altura, podemos ver una columna de humo en toda la parte norte de la montaña de Alicante y desplazarnos a ella en cuestión de cinco minutos".

La colaboración, que ha sido aplaudida por la directora general de Prevención de Incendios Forestales, Delia Álvarez Alonso, arrancó el mismo viernes, justo cuando los nuevos voluntarios aéreos alertaban del incendio que se declaró en La Foia, en el municipio de Tibi.