Los plenos son para Alcoy
Es difícil llegar a comprender las políticas de los socios de viaje de PSOE, en este caso Izquierda Unida, en el actual bipartito del gobierno de nuestra ciudad. No cansados de realizar una gestión estéril y carente de proyectos claros para nuestra ciudad, ahora nos quieren embarcar en un referéndum sobre el modelo de estado que, creen, necesita nuestro país.
Hay que reseñar, que los plenos en el Ayuntamiento cuestan dinero a todos los alcoyanos y me parece una aberración que , ante los graves problemas que aún tenemos por delante, gastemos del erario público en estos temas, que al final, sólo llevan a la crispación y no a la unidad, que es lo que ahora más necesitamos.
Los plenos de nuestro Ayuntamiento tienen que ser concretos y efectivos para debatir lo que realmente es necesario en nuestra ciudad y no enzarzarnos en propuestas que seguramente no preocupen a la mayoría de los alcoyanos y no resuelvan ninguno de los problemas que tenemos en Alcoy.
Todavía no he visto ninguna propuesta de la actual alcaldía para definir un claro modelo de futuro de nuestra ciudad, para combatir el desempleo que azota a Alcoy, o que se preocupe de los problemas mas cotidianos.Pero sí tenemos tiempo para fotos con proyectos de empresas privadas, como Telefónica, para intentar adjudicarnos el mérito como propio. Echo de menos fotos con empresarios alcoyanos, eso es lo que nos hace falta.
Es muy preocupante que dediquemos un Pleno municipal para proponer consultas sobre la Monarquía o sobre las fiestas de moros y cristianos. Realmente es este el sentir de los alcoyanos?, o no creen ustedes que les votaron para gestionar y promulgar una serie de medidas, a las que los demás les damos el nombre de programa electoral, que conlleven la recuperación de Alcoy.
Para terminar y en referencia a los alegatos de respeto de la soberanía popular, a los cuales nos remite la Sra. Blanes. Flaco favor le realizaron ustedes cuando la mayoría del pueblo alcoyano eligió en las urnas un nuevo Gobierno local del Partido Popular y sus confabulaciones nos llevaron a un tripartito que con el tiempo se resquebrajo y del cual sólo quedan sus cenizas en forma de bipartito estéril e inerte.